¡Un aventura para todas las personas es posible!
irse de vacaciones es sinónimo de descanso, no solo físico, también mental. Sin embargo, a no todos les resulta tan sencillo lograrlo!
Para muchas personas con discapacidad o con necesidades diferentes, salir de vacaciones puede significar tener que enfrentarse con muchas barreras, dificultades y malos entendidos.
Las escaleras de un museo, las puertas giratorias de un hotel, semáforos sin indicaciones sonoras, restaurantes sin menús en braille o sin opciones sin gluten u otras dietas especiales, todo esto puede transformarse en obstáculos difícilmente superables.
Cadena de Accesibilidad Turística, A organizar el viaje!
Es FUNDAMENTAL la planificación anticipada de nuestras vacaciones, en cada una de los eslabones de esta cadena.
De poco nos servirá que nuestro cómodo hotel sea accesible si desde allí no podemos llegar a las atracciones o restaurantes de la ciudad, o no hay menús especiales según nuestras necesidades, o no hay sistemas de asistencia auditivas en los teatros. Nuestro lindo hotel se transforma entonces en una Jaula de Oro, ya que fuera de ´le poco y nada podremos disfrutar.
Al igual que el transporte, tanto para llegar al destino como para movilizarse en la ciudad (sea público o privado) vamos a tener que investigar y contratar de ser posible con anticipación.
Para disfrutar al máximo su viaje es recomendable que seleccione y priorice los destinos que le permitan ir entrelazando cada eslabón de esta cadena.
Opciones de Transporte
Primer paso de nuestras vacaciones y en general, el que mas se nos puede complicar.
Hospedaje Accesible
Encontrar el hogar lejos de casa, donde todas nuestras necesidades estén previstas.
Trastornos Sensoriales
Consejos para evitar la sobre estimulación, el estrés por los cambios, las multitudes y ruidos.
Dietas Especiales
Prioridad en colas e ingresos de museos, espectáculos y tiendas.
